Aquel dia recogi a mi chica como tantas veces, rutear sin rumbo y sentir el viento en la cara, disfrutar de la carretera y compartir ese momento en una deliciosa sensacion, alimento del alma, del espiritu, limpieza etnica de los malos rollos acumulados...un placer....sin duda...
Sin embargo, como puede cambiar la cosa en un instante, el destino, ese capricho temporal sin amo, violo sin piedad ese instante de felicidad.
Aceite en la calzada, un error de presion al frenar, no se que paso exactamente, lo que si se, es que caimos, rodamos y sangramos, solo heridas, solo recordatorios de el error en forma de cicatriz....
Es lo que nos hace adictos, esa posibilidad de peligro constante, la llaman pulsion de muerte, siempre acechante, corre la adrenalina cuando sabes que vas a arriesgar en una trazada, te excitas, cuero negro, motor sonoro, velocidad...es casi sexual, un coito funebre a veces, increible otras....eyaculemos todos, gozemos pues....el orgasmo es real....las muertes, desgraciadamente.....tambien...
Rafagas a los caidos, siempre heroes, siempre recordados....
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